Estoy muy contento de informar que el gusto del “sete capotes” o “aguaricará” es excelente, comparable al de una buena naranja, buen balance entre acidez y dulzura. La pulpa es arenosa y jugosa, la piel, similar al kiwi por sus pequeños pelos, es muy amarga, por lo cual no recomiendo comerla. Este frutito contenía 2 semillas de 0.5 cm de diámetro, achatadas, que no se desprenden fácilmente de la pulpa.
Fue una grata sorpresa porque este fruto es 3 veces más pequeño de lo que sería un fruto bien desarrollado, pero el árbol es pequeño aún y fue su primer y único fruto. Es una especie muy ornamental por sus hermosas hojas afelpadas, sus flores que brindan un aroma tan bueno como el de las rosas, y ahora sabemos que su fruto es muy apetecible.
Habrá que esperar 1 año para probar más delicias como esta.